La instalación eléctrica de los hogares es esencial para combatir el cambio climático y alcanzar los objetivos de descarbonización de la Unión Europea para 2050. Sin su modernización, la eficiencia energética en el sector residencial español será casi imposible.
Tras el objetivo ambicioso de la Unión Europea (UE) de descarbonizar totalmente los parques residenciales para 2050 y maximizar la eficiencia energética de edificios y viviendas, el OREVE, a través de un estudio advierte a administraciones, agentes rehabilitadores y ciudadanía que sin una actualización de las instalaciones eléctricas de los hogares, alcanzar estos objetivos en el sector residencial en España será algo prácticamente inalcanzable.
Para que esta transformación sea posible, es esencial equipar los hogares con instalaciones capaces de sostener tanto la generación de energía renovable como la incorporación del consumo eléctrico que ha de sustituir a los combustibles fósiles. La eficiencia es imprescindible, pero una infraestructura eléctrica en el hogar es y será crítica.
El ambicioso reto de la UE
Las directrices de la UE son firmes y claras. Si España desea liderar la transición energética, es fundamental reconfigurar el modelo energético de las viviendas, apostando por tecnologías más eficientes y la consecuente electrificación de los usos domésticos a partir de la generación renovable de esa electricidad.
La situación en España, hoy en día, genera si más no, inquietud: aproximadamente el 40% del consumo energético actual de las viviendas españolas proviene de combustibles fósiles. Esta cifra no hace más que subrayar la imperiosa necesidad de replantear cómo electrificamos nuestras casas para poder cumplir con las exigencias europeas.
La falta de actuación en las instalaciones eléctricas: ¿Cómo solucionarlo?
Hasta ahora, las iniciativas y ayudas para la rehabilitación se han centrado principalmente en mejorar la envolvente de los edificios, relegando a segundo plano la adopción de tecnologías eficientes para el uso de la energía doméstica. Aunque mejorar la envolvente sí va en la misma línea, esta medida por sí sola no es suficiente para cumplir con los mandatos de Bruselas.
En nuestro país, únicamente un 22,44% de los 26,6 millones de viviendas se han construido conforme la normativa más reciente del Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT). Este dato revela la magnitud del problema al que se enfrentan muchos españoles, ya que la mayoría de los hogares tienen instalaciones eléctricas obsoletas, o, en el mejor de los casos, inadecuadas.
Sin una instalación eléctrica adecuada, será muy difícil avanzar hacia un modelo energético limpio y eficiente que beneficie tanto a los propietarios como al medio ambiente.
Dar más protagonismo a la instalación eléctrica
La falta de comprensión sobre la importancia de la instalación eléctrica en el proceso de descarbonización es preocupante; en general, la ciudadanía no es consciente de su relevancia, tal como se deduce del informe elaborado por el OREVE. Las personas propietarias son la clave en este proceso de transición energética del sector residencial y necesitan información.
La instalación eléctrica es la gran olvidada en la descarbonización del sector residencial, por todos los actores y en todos los ámbitos. Tanto por Administraciones, personas propietarias y, en menor medida, agentes rehabilitadores y profesionales.
Por la antigüedad del parque residencial español y la poca notoriedad que tiene la instalación eléctrica entre las prioridades de las actuaciones en la vivienda, según las personas propietarias encuestadas, se puede afirmar que el número de viviendas con instalaciones insuficientes o en mal estado es muy elevado.
Una llamada a la acción
En el informe OREVE 2024 se evidencia que sin una infraestructura eléctrica moderna y segura, nuestras metas para con la descarbonización se desvanecen. El estudio arroja datos implacables sobre los propietarios y el papel de la instalación eléctrica en este proceso, una información que oremos desgranando en este blog.
Frenar la crisis climática y un futuro más sostenible depende de ello.
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